Lo cambio y listo
- photostilman
- 30 sept 2015
- 1 Min. de lectura

Uno de los errores más nefastos que se pueden cometer en una instalación eléctrica. A lo largo de mi vida profesional, he visto cocinas incineradas, enchufes derretidos, acometidas sin aislante y chisporroteando, y toda una serie de siniestros provocados por la misma fatídica acción. ¿Qué es el efecto Joule? Una determinada línea de la instalación está preparada para soportar un consumo, por ejemplo, de diez amperios, pero se sobrecarga con aparatos que demandan una mayor intensidad de energía. El efecto resultante es que la línea se sobrecalienta hasta que el automático térmico “salta” y corta el suministro energético en esa línea. Esto provoca el consiguiente enfado del propietario de dicho aparato, que, ni corto ni perezoso, abre el cuadro eléctrico, y sustituye el automático magneto-térmico por otro de mayor potencia, sin sustituiir los cables de la línea por otros adaptados a la nueva demanda de energía. La línea, por lo tanro, se calentará, ofreciendo mayor resistencia al paso de la corriente eléctrica, lo que a su vez, calentará aún más la línea; lo que se conoce como “efecto Joule”. Por lo general, se desconectará el aparato en cuestión antes de que el cable se encienda, pero el aislante queda dañado. Lo más normal, es que después de repetir este ciclo un número de veces, el cable arda en llamas y provoque un incendio de consecuencias imprevisibles. Aunque actualmente se instalan cables ignífugos, no ocurre así en el noventa y nueve por ciento de las instalaciones existentes. De ahí la importancia de NO ABRIR EL CUADRO BAJO NINGÚN CONCEPTO, si no se es un profesional de la electricidad. (c) 20013 Ricardo Capdepón























Comentarios